Los ayunos en general están de moda, fundamentalmente con el propósito de adelgazar, desintoxicar el organismo o influir en determinadas enfermedades. Auspiciado por influencers y creadores de contenido, hay que conocer sus beneficios, pero también sus riesgos y efectos secundarios.
En este artículo hablaremos de diferentes tipos de ayuno y analizaremos para quiénes pueden ser más adecuados, considerando factores como el sexo, la edad y el estilo de vida, aunque conviene ponerse en manos de un nutricionista antes de tomar la elección. En los siguientes tres cuadros te avanzamos parte del contenido.
Se llama ayuno a la ausencia de ingesta de alimentos sólidos durante un tiempo determinado. El más común es el ayuno nocturno, el que tiene lugar entre la última ingesta del día (normalmente la cena) y la primera del día siguiente (habitualmente el desayuno).
A diferencia de las dietas tradicionales que se centran en qué comer, el ayuno se enfoca en cuándo comer. Este enfoque puede ofrecer varios beneficios, como la pérdida de peso, la mejora de la sensibilidad a la insulina y la promoción de la autofagia, un proceso celular que contribuye a la reparación y el mantenimiento celular
Tipos de Ayuno
Hay muchos tipos de ayuno:
Ayuno periódico: Un día a la semana no se toman alimentos, salvo agua.
Ayuno de días alternados: Se intercalan días de ayuno con días de ingestas libres.
Ayuno intermitente: Aquí los ayunos son de un determinado número de horas, normalmente 12h, y las ingestas se realizan entre las horas restantes. Se suele eliminar la cena y ajustar los horarios del resto de ingestas.
Ayuno espontáneo: No sigue realmente ninguna regla, sino que el individuo decide ayunar por falta de ganas o de tiempo.
Ayuno largo: Es el más drástico de los ayunos, donde solo se ingiere agua o infusiones durante semanas o incluso meses, según el propósito. En este caso, habría una malnutrición clara por falta de macro y micronutrientes (sales minerales y vitaminas), imprescindibles para muchos procesos metabólicos, por lo que está desaconsejado.
Ayuno con zumos: Se trata de tomar solo líquidos, compuestos de zumos o jugos de vegetales. Es más una restricción de alimentos que un ayuno real.
Durante cualquiera de los ayunos es muy importante hidratarse. Podemos tomar agua mineral de mineralización débil a la que se le pueden añadir vegetales (frutas, hortalizas o hierbas aromáticas) para aportar algo de sabor. También se pueden utilizar infusiones frías o calientes, de diversas plantas medicinales, que pueden ayudar al propósito del ayuno
A su vez, dentro de los ayunos, existen varios métodos, cada uno con sus propias características y desafíos. A continuación, te ofrecemos una descripción de los más comunes:
1) Ayuno periódico o Ayuno de 24 horas (Comer-Parar-Comer)
Este método implica ayunar durante 24 horas, una o dos veces por semana. Por ejemplo, si cenas a las 8 p.m., no comerías nada hasta las 8 p.m. del día siguiente. Evidentemente, hay que evitar el atracón el día que toca comer.
2) Ayuno en Días Alternos
En este método, se alternan días de ayuno con días de alimentación normal. Durante los días de ayuno, algunas versiones permiten una pequeña ingesta calórica de alrededor de unas 500 calorías, mientras que otras sugieren seguir un ayuno total.
¿Para quién es adecuado?
3) Ayuno intermitente
Método 16/8
Es uno de los métodos más populares y conocidos y consiste en ayunar durante 16 horas al día y restringir la ingesta de alimentos a un periodo de 8 horas. Por ejemplo, si cenas a las 9 de la noche, la siguiente comida sería a eso de las 13 h del día siguiente.
Este método tiene otras variantes como son:
Métodos 14/10; 18/6; 20/4
En estos casos, las ventanas horarias dentro de las que están permitidas las ingestas son de 10, 6 y 4 horas respectivamente, eliminándose normalmente, desayunos y cenas y alguna ingesta intermedia.
Método 5:2
En este enfoque, se come normalmente cinco días a la semana y se limita la ingesta calórica a 500-600 calorías durante los otros dos días restantes, que serán no consecutivos.
4) Ayuno espontáneo
El ayuno espontáneo no sigue un patrón rígido. En su lugar, se decide ayunar en función del apetito o el horario, saltando comidas cuando no se tiene hambre o cuando no se tiene tiempo para comer.
Conclusiones y recomendaciones generales
En general, las distintas variantes del ayuno pueden ser una herramienta poderosa para mejorar la salud y gestionar el peso, pero no son soluciones infalibles y universales. La clave es encontrar el método que mejor se adapte a tu perfil personal, considerando tu sexo, edad y estilo de vida. Escuchar a tu cuerpo, ser flexible y buscar asesoramiento profesional son pasos esenciales para aprovechar al máximo esta práctica sin comprometer tu bienestar.
El impacto del ayuno puede variar considerablemente según el sexo, la edad y el estilo de vida de una persona. A continuación, se ofrecen algunas pautas generales:
Según el sexo:
Según la edad:
Según su estilo de vida:
En cualquiera de los casos, las ingestas que se realicen deben asegurar el aporte suficiente de macro y micronutrientes para no caer en déficit. Por ejemplo, hay que recordar que las vitaminas hidrosolubles (Vit C y las del complejo B), no se acumulan en el organismo, y su aporte debe ser a diario.
¡¡¡Muy importante!!!